PERROS Y FUEGOS ARTIFICIALES. SOLUCIONES

PERROS Y FUEGOS ARTIFICIALES. SOLUCIONES

A MI PERRO LE ASUSTAN LOS FUEGOS ARTICICIALES. ¿QUÉ HAGO?

­–Le puedo dar las pastillas sedantes que me ha dado el veterinario para que se tranquilice, sí, son esas mismas pastillas que me dio para los viajes…

El principal compuesto activo de dichas pastillas es la acepromacina, y es costumbre incluso todavía, mandarlas desde el gremio veterinario a los pacientes cuando tienen que realizar un viaje o su animal se asusta con los ruidos. Lo que se pretende es que el animal no sienta miedo en eventos que lo podrían desencadenar, y al verlo relajado o incluso dormido, creemos que el animal está tranquilo. Sin embargo, esto no es lo que se consigue en realidad. Desde aquí os explicamos el por qué.

La acepromacina es un fármaco del grupo de los neurolépticos. Su mecanismo de acción trata de bloquear los receptores dopaminérgicos en los ganglios basales y sistema límbico. Produce además depresión del sistema nervioso central, que conlleva sedación e incoordinación. Pero vamos, después de toda esta verborrea científica lo que en realidad queremos decir es que afecta disminuyendo las reacciones motoras pero apenas disminuye la percepción sensorial. ¿Y esto qué quiere decir? Pues que cuando damos la pastilla tenemos un perro cuya respuesta motora está disminuida, pero que seguirá percibiendo el estímulo como amenazante, por lo que podemos agravar la fobia. Imaginaos que impotencia tener una posible amenaza al lado y no poder moverse ante ella. También se trata de un fármaco que desinhibe la conducta agresiva con lo que puede ser peligroso para el propietario.

¿y qué podemos hacer?

Ante los fuegos artificiales, por ejemplo, tenemos varias opciones. O no hacer nada y esperar a que las fiestas de ese día pasen, o si es un pueblo muy fiestero, existen varios fármacos que junto con técnicas de modificación de conducta pueden ayudar mucho a mejorar ese estado de ansiedad. Pero estos métodos tienen resultados a largo plazo, por lo que hay que tener paciencia, ya que sin duda es lo mejor para nuestros animales. Un ejemplos de estos fármacos es el Adaptil para perros que es una mezcla de aminoácidos y vitaminas que tienen efecto relajante en el perro. El feliway, son feromonas faciales que relajan a los gatos y los hace sentirse seguros. Por otro lado tenemos el Clomicalm (clomipramina) que es un antidepresivo tricíclico, vamos, como el Prozac pero para perros (que por cierto, el Prozac también se puede usar en perros). ¿Y qué es lo que hace? Cambia la química cerebral para que el animal esté más relajado y feliz, pero no sirve de nada si no se apoya con técnicas de modificación de conducta, lo que significa educarlos y reforzarlos para que no tengan miedo a esas fobias. Por ejemplo, acostumbrándolo a los ruidos incluso de día, sacándolos a la calle para que escuchen el jaleo de la ciudad o poniendo videos cada vez más largos de fiestas y cohetes para que se vayan acostumbrando paulatinamente. Tenemos otros métodos de relajación a base de hierbas relajantes que al parecer dan muy buenos resultados. El producto se llama Pet remedy, y lo hay en difusor, spray y atomizador con batería de pilas.

En los viajes ocurre algo parecido. El animal se estresa, y la acepromacina aunque parezca que lo relaja lo único que consigue es aumentar la fobia a los viajes. Por otro lado, hay algunas compañías de vuelos que no permiten utilizar estos productos sedantes para los animales que van en bodega, y es lógico ya que estos sedantes producen hipotermia y en las bodegas de los aviones las temperaturas son muy bajas, o al menos los suficiente para que una sedación afecte negativamente.

En definitiva, lo más importante para eliminar traumas y miedos es una buena educación de base. Incluso una vez establecido el trauma intentar al inicio un cambio conductual sin fármacos y si aún así no mejora, complementar con ayuda farmacológica (Clomipramina). Cualquier duda que tengáis estamos a vuestra disposición.

 

 

 

 

 

 

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