Mi perro y los cuerpos extraños
Aunque ya han terminado las navidades, el problema de que tu perro se coma lo primero que ronda por la casa es un problema que no tiene fecha. Desde cualquier tipo de huesos de comida (pollo, jamón, cordero) hasta calcetines, medias, pelotas, pelos, piedras, arena… como ves, la variedad es grande. Aunque en ocasiones es dificil de evitar, desde aquí te aconsejamos unas pautas de comportaniento básicas.
- No echar las sobras de la comida y menos si tienen algún tipo de hueso a nuestra mascota, podría obstruirse o perforarse el intestino, muchas horas de quiròfano quitando huesos atascados avalan este consejo.
- Intentar educar desde pequeño a nuestro can para que no coja de la calle piedras u otros objetos ya que así no solo evitamos obstrucciones, sino también posibles intoxicaciones.
- Mantener la casa siempre bien recogida, sin calcetines ni medias de por medio, sobre todo cuando son cachorros, que es cuando más necesidad de trastear tienen.
- Si lo sacamos enganchado con la correa podremos tirar de él si lo vemos con intención de ingerir algo poco adecuado, lo cual nos facilitaría la enseñanza y también de camino evitamos que se escape o cruce la carretera cuando pasen vehículos.
Los síntomas más comunes por ingerir cuerpos extraños de tamaño prominente, si está en estómago, son vómitos esporádicos, a veces más continuos, pero suelen defecar. Si pasan a intestino, tenemos dolor abdominal, no suelen defecar y los vómitos tienen el color de las heces, pérdida de peso y apatía. También en ambos suelen tener ansiedad por beber agua y comer hierba.
En definitiva, aunque a veces son ellos mismos los que buscan con ansia el llevarse lo que no es debido a la boca, dejando el suelo de casa bien limpio de objetos y con una buena correa y paciencia lograremos pasar con éxito el mal trago de que nuestra mascota ingiera cuerpo extraños no deseados.
Disculpa, el formulario para comentarios está cerrado en este momento.